Portada del informe sobre Argumentario a Favor de la Inversión para poner fin a la violencia contra los niños

Argumentario a Favor de la Inversión para poner fin a la violencia contra los niños

Los niños tienen derecho a vivir sin violencia. Poner fin a la violencia es uno de los compromisos asumidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y, aun así, más de la mitad de los niños del mundo están expuestos cada año a alguna forma de violencia. El impacto de esta violencia es devastador y duradero. Además del costo humano, la violencia contra los niños impone una considerable carga económica en todos los países, independientemente del nivel de ingresos, la región o el contexto cultural. La violencia genera costos directos e indirectos de distintas maneras. Los niños que son víctimas de violencia corren el riesgo de no desarrollar todo su potencial en educación o salud, lo que limita sus ingresos y productividad en el futuro. Los gobiernos afrontan costos directos al responder a las repercusiones de la violencia en la salud de las víctimas a corto y largo plazo. También hay costos sustanciales asociados a la respuesta de los sistemas judicial y de protección de la infancia, por llevar a los responsables ante la ley y por ofrecer servicios de rehabilitación a las víctimas, respectivamente. La violencia contra los niños también tiene. ¿Por qué hace falta un argumentario a favor de la inversión en este ámbito? 2 Argumentario a favor de la inversión para poner fin a la violencia contra los niños, costos indirectos a largo plazo, dado que socava las inversiones en la salud y la educación infantiles y en los demás sectores sociales. Según estimaciones por países, los costos totales directos e indirectos de la violencia llegan al 11 % del PIB nacional . La magnitud del costo resulta evidente cuando se compara, por ejemplo, con el gasto público total en salud: los costos anuales de la violencia contra los niños superan el gasto público anual en salud de varios países, y en algunos casos hasta lo sextuplican.