Invertir en protección y bienestar infantil: un acelerador clave de los ODS

A menos de seis años de cumplir la Agenda 2030, el mundo sigue lejos de la mayoría de las metas de los ODS, incluido el compromiso de poner fin a todas las formas de violencia contra la infancia. A pesar de los esfuerzos continuos, la violencia contra la infancia sigue siendo generalizada y se ve exacerbada por crisis multifacéticas y superpuestas. Para poner fin a la violencia contra la infancia, se necesita una acción urgente y coordinada de todos los sectores para abordar estos desafíos y proteger los derechos de cada niño.

2024 fue un año crucial en la lucha mundial para poner fin a la violencia contra la infancia. Esto se puso de manifiesto en los esfuerzos mundiales para movilizar a todas las partes interesadas, revitalizar los compromisos, fortalecer el multilateralismo y fomentar alianzas sostenibles y adaptadas a cada contexto. Entre los hitos clave se encuentra la primera Conferencia Ministerial Mundial para Poner Fin a la Violencia contra la Infancia, celebrada en Bogotá (Colombia) en noviembre, que se basó en dinámicos procesos preparatorios nacionales, regionales y mundiales con múltiples partes interesadas. Se espera que el lanzamiento de la revitalizada Alianza Mundial Pathfinding para Poner Fin a la Violencia contra la Infancia en la Conferencia Ministerial genere acciones y resultados más sólidos para garantizar la protección de la infancia.

Además de estos esfuerzos globales, en 2024 se cumplieron 15 años de dedicada defensa de la protección y el bienestar de la infancia bajo el mandato de la Representante Especial del Secretario General sobre la Violencia contra los Niños (RESG-VAC). Este aniversario subraya la importancia de la colaboración continua en nuestro trabajo por un mundo donde todos los niños estén seguros y protegidos.

Este fuerte y creciente impulso a la protección de la infancia debe continuar. Debe aprovechar los logros alcanzados hasta la fecha, evaluar los obstáculos comunes y acelerar las acciones para cumplir la promesa de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Espero que este informe sirva de herramienta a los Estados Miembros que se preparan para el próximo ciclo de sus Exámenes Nacionales Voluntarios (ENV). Este proceso se basa en la participación actual de los Estados en, por ejemplo, los procesos de presentación de informes sobre la implementación de la Convención sobre los Derechos del Niño, el Examen Periódico Universal y el seguimiento nacional y regional de la Conferencia Ministerial Mundial para Poner Fin a la Violencia contra los Niños. Mantengo mi compromiso de actuar como puente y catalizador para apoyar estos esfuerzos.